Cristian Cuturrufo

Es la gran figura del jazz chileno surgido en los ’90. El trompetista Cristián Cuturrufo estableció su nombre y un prestigio en la escena desarrollando una honesta y muy sólida reformulación de la música beebop a través de sus grandiosos dotes de solista e improvisador. Supo asimilar este lenguaje venido desde Nueva York e imprimirle un carácter propio, destacando por lograr un sonido único, con clara influencia latinoamericana, es reconocible por ser envolvente y arrollador. Nacido en Coquimbo en 1972, tuvo el privilegio de nacer en una familia de músicos. Dirigidos por su padre, quien toca acordeón y piano, tempranamente fue familiarizado con diversos instumentos, siendo el bongó su primera elección! Pero es en su adolesencia cuando se decide por la que será su fiel aliada, la trompeta . Así, gracias a su contexto familiar, vinculado a las tradiciones musicales del puerto y a las fiestas religiosas populares de la región, recibe esta herencia musical tan rica y diversa, imprimiéndole un sello distintivo que cautiva y seduce tanto a la audiencias doctas como al auditor casual. Sus estudios musicales se inician en la Escuela Experimental de Música Jorge Peña Hen, en La Serena. Posteriormente, mientras cursa su enseñanza secundaria, es becado para estudiar en Santiago de Chile, trompeta clásica en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde después de cuatro años de intenso estudio, es invitado a viajar a Cuba para estudiar con el gran maestro Luis Alimañi, y así profundizar sus concocimientos técnicos del instrumento, liberándose de la rígida estructura de la música docta. Esta experiencia le permite empaparse da la riqueza de la música popular y de los ritmos afrocubanos , tanto, que marcarán y sellarán la impronta de su estilo singular. Si bien tambien se reconoce su inspiración en solistas como Fat Navarro, Dizzy Gillespie, Kenny Dorham, Freddy Hubbard y Chet Baker.

De vuelta en Chile participa de agrupaciones de Latin Jazz como Motuto, para luego ser parte de numerosas bandas de jazz. En una carrera que lo ha llevado a desarrollar la estructura del quinteto como plataforma ideal para el libre desarrollo de sus fenomenales y altamente inflamables solos, Cuturrufo ha sido investido como el trompetista más rápido y ardiente desde que el jazz chileno volviera a la vida luego de las catacumbas de la dictadura. Entre los muchos músicos de jazz con quien ha compartido escenario y jam sessions destacan James Muddy, Lew Tabackin, Warren Bachet, Herbie Hanckok, Iván Linz, Roy Ayers, Diane Reeves, Brad Medlau, The New York Voices, entre otros. Además ha formado parte de la agrupación Los Titulares, de Francisco Molina, y en los proyectos Vernáculo y Cutus-Clan, dirigidos ambos por Rodrigo Cuturrufo, hermano mayor de Cristián, donde también participan otros integrantes de la familia. Cristián Cuturrufo es galardonado con el Premio Altazor 2001 por mejor ejecución musical.